Pan de vino tinto

Hace poco más de un año y medio cambié Madrid por Logroño y no puedo estar más contenta de esta decisión.

Madrid es precioso, y de vez en cuando lo echo de menos, pero no es cuidad para mí. Además mis últimos meses no fueron fáciles y necesitaba un cambio. Lo que no podía imaginar es que ese cambio fuera tan importante para mí.

Trenza de solomillo con salsa de vermú

Escríbelo como quieras vermú, vermut, vermout o vermouth porque esta bebida está en auge. Ha pasado de estar prácticamente olvidada, relegada a ser consumida por un reducido número de mujeres que ya habían cumplido los cincuenta, a estar de candente actualidad, y es que ahora es fácil escuchar a gente relativamente joven pidiendo un vermú, o encontrar en cualquier bar otra marca que no sea esa que hace anuncios en blanco y negro con hombres y mujeres de gran atractivo y lo que más me alegra es que en numerosos establecimientos encontramos un cartelito en el que se lee: “Tenemos vermut de grifo”. 

No podemos olvidar la importancia que tiene esta bebida que da nombre a esa costumbre tan nuestra de ir a tomar unos pinchos y unos vinos antes de comer.

Un buen maridaje

Cuando la comida y la bebida que hay en una mesa dejan de ser relevantes...

Lomo de cerdo al vino de Oporto

Antes de empezar con la receta hoy tengo que felicitar a dos personas muy importantes para mi: mi hermana y mi primo Enri. La próxima vez que os vea os voy a dar un achuchón enorme y si puedo os cocinaré algo. Los dos os merecéis lo mejor del mundo.

Aquí podemos verlos junto a mi otra prima hace unos pocos años

Ahora ya sí que empiezo con la entrada de hoy, porque desde que abrí el blog las recetas con vino aparecen en los lugares más inesperados, el último, un folleto de ofertas del supermercado. 

Una de mis mayores aficiones es desayunar, y si puede ser tranquilamente sentada en un sofá mejor. Hace tiempo descubrí que me parece de lo más relajante y divertido desayunar viendo la propaganda de diferentes establecimientos, me da igual que sean de muebles, jardines, supermercados, juguetes,... Y así, desyunando, es como apareció esta nueva receta, entre 3x2 en zumos.

MasterChef

La semana pasada empezó Masterchef, ese programa que ha triunfado en más de 140 países y que busca al mejor cocinero amateur del año. Un programa que seguí en su versión norteamericana, quizá por eso, esperaba con ilusión su versión española y quizá por eso, también me defraudó.

Crónica de la XXVII edición del Salón de Gourmets

Si hace unas semanas divagué con la idea de ir al XXVII edición del Salón de Gourmets es fácil imaginarme ávida de información, buscando toda noticia posible sobre el desarrollo del mismo, blogs, periódicos, revistas especializadas,... han sido mis compañeras estos días.

Después de releer todo lo encontrado os doy mi propia visión del evento, igual no tiene mucho sentido puesto que no he visto, olido ni saboreado nada de lo que voy a hablar pero es que me apasiona tanto este mundo que no me cuesta nada cerrar los ojos y transportarme a IFEMA.

Merluza al cava

Nunca había probado el pescado al cava y realmente sentía mucha curiosidad porque me parece una combinación delicada, de sabores suaves y que encajan a la perfección. 

Aprovechando que mi pescadero tenía merluza de pincho, fresca y a buen precio me decanté por este pescado, aunque puede hacerse con cualquier otro: rodaballo, rape, lubina,... Y le dije que me sacara los lomos. Al llegar a casa busqué en un par de recetarios que tengo y en alguna que otra página de Internet, la mayoría de las recetas eran más complejas que la os voy a presentar a continuación, incluían más ingredientes y la elaboración se dividía entre el horno y la cazuela, pero personalmente soy más de recetas sencillas y más para el blog, para que así cualquiera de los que me leéis os animéis a hacerla aunque no seáis unos expertos cocineros.

XXVII edición del salón de gourmets

De momento es solo una ilusión, imaginarme rodeada de cientos de stands y en cada uno de ellos un producto especial, único, diferente. Poder ver una demostración o una cata en cualquier punto que me alcance la vista. Empaparme de vanguardia y modernidad gastronómica sin perder el gusto por la tradición.

Algún día perteneceré a este sector, tendré mi propio restaurante o mi empresa de catering, no sé qué ni cuándo será pero en mi vida quiero que la gastronomía esté presente y si puedo compaginarlo con el vino sería perfecto.

Es un sueño, quizá una utopía pero es algo en lo que me gusta pensar y que cuando lo hago no puedo evitar sonreír.

Bizcocho de chocolate al vino tinto

Si existe el amor a primera vista lo mío con esta receta ha sido un caso clarísimo.

La semana pasada mirando por internet, buscando nuevos platos e ideas para el blog encontré esta receta, la leí y me sedujo totalmente la idea de mezclar chocolate y vino tinto en un bizcocho. Tenía totalmente claro que iba a ser una receta que os mostraría en el blog, lo que no podía imaginar es que mi mente recordara las imágenes que había visto del bizcocho e imaginara su textura y sabor con tanta frecuencia, no pude dejar de pensar en él en un par de días.

G’Vine, de uva a ginebra

 Desde hace unos años se ha disparado la fiebre por el gintonic en nuestro país, pasó de ser una bebida un poco abandonada a parecer sinónimo de saber beber y vivir. En cualquier bar al pedir este combinado el camarero amablemente saca una copa de balón que llena con hielos y con la ginebra que tú mismo eliges de las múltiples opciones posibles. Con esta elección también determinas qué tónica y qué frutas o especies te acompañan en el disfrute del gintonic. Ahora que llega el fin de semana podemos parar del ritmo diario y saborear un gintonic, ¿por qué no probar uno preparado con una ginebra diferente, única, elaborada con uva?

Así es como se presenta G’Vine y yo voy a intentar acercaos un poco a esta ginebra.

Gelatina de cava

Me declaro fan incondicional del cava. Me gustan las burbujitas y la asociación a días de fiesta y celebración que evoca aunque a mi cualquier ocasión me parece perfecta para descorchar una botella ya sea de cava, champagne o vino espumoso.

Otro día hablaré de este tipo de vino, de su elaboración, cómo conservarlo y servirlo pero hoy toca una receta sorprendente y refrescante. Si pensamos en un postre con cava pocas ideas vienen a la mente, como mucho podemos pensar en el típico (y delicioso) sorbete de limón o mandarina pero la receta de hoy es gelatina de cava.

Concurso de cata por parejas

Vila Viniteca es una tienda, distribuidora y representante de grandes vinos nacionales y mundiales de gran prestigio. En su afán por divulgar la cultura del vino organizan un gran número de catas, monográficos sobre vino, cenas maridaje, participan en distintos medios de comunicación y son los responsables de diferentes eventos: La música del vi (presentación para profesionales del sector de las ultimas añadas de las bodegas que representan), Fiesta del Vino Joven en el Barrio del Born de Barcelona (con la participación de más de 30 bodegueros de distintas zonas vitivinícolas en la que se  acompañan los vinos de la última cosecha con tapas y platillos elaborados por los restaurantes más emblemáticos del barrio) y Premio Vila Viniteca de Cata por Parejas.

Carrilleras txirimirescas

Durante casi ocho años estuve viviendo en Madrid y uno de mis rincones favoritos de esta ciudad fue el Txirimiri. No, no es esa típica lluvia fina y casi imperceptible que en mi pueblo se llama calabobos, si no un bar situado en la calle General Díaz Porlier 91. Como vivía bastante cerca lo descubrí por casualidad, paseando, antes de entrar tuve la corazonada de que me iba a gustar y no me confundí.

Es un bar no muy grande de dos plantas, la primera con la barra y la de abajo con un pequeño comedor. En las paredes, sobre pizarra, está escrita la carta, original y cambiante para adecuarse al gusto de los clientes con platos tan sugerentes como: crujiente de confit de pato con crema de foie, croquetas de boletus, trufa y jamón, lasaña negra de rape, langostinos y leche de coco, falso rissoto de queso Idiazábal con espárragos verdes,…

Sabor español en los Óscar

Ayer todos los medios de comunicación  hablaron del atuendo que lucieron  las actrices sobre la alfombra roja, incluso si se cambiaron para la posterior cena, pero en pocos medios tuvo repercusión el sabor español de los Oscar. Ya sé que ni Naomi Watts se hizo con la estatuilla a la mejor actriz principal por su actuación en Lo imposible, ni pudimos ver desfilar a Penélope Cruz, porque este año la representación española ha sido un vino.

Un buen comienzo

¿Qué comemos antes de un gran plato principal? y ¿qué hay detrás de un gran vino?

Los entrantes son la solución a la primera pregunta. Si evocamos en nuestra mente la imagen de una mesa preparada para una celebración especial podemos ver sobre ella más de un plato con pequeños detalles gastronómicos que nos abrirán boca y darán paso a algún suculento plato.

Para poder contestar a la segunda pregunta tenemos que pensar en las uvas, ya que sin una gran uva jamás podremos elaborar un vino de calidad, porque aunque se ha avanzado mucho en los procesos de vinificación, al igual que en la cocina, en el vino la materia prima es el principal factor que determinará la calidad del producto final.

Como ésta es mi primera entrada quería tener un buen comienzo y dar el protagonismo a un par de aperitivos cuyo ingrediente estrella son las uvas. En ambas recetas junto a las uvas aparece el queso, porque como se dice en mi casa: “las uvas con queso saben a beso”. Y que mejor manera de empezar un blog que con recetas que inviten a besar.

UVAS RELLENAS

Ingredientes

• 500g de uvas, 300g de queso crema, 100g de queso azul, nueces (para decorar)

Con ayuda de un cuchillo hacemos un pequeño corte en las uvas y con mucho cuidado quitamos las pepitas, también cortamos un poco la base para que asienten. En un bol mezclamos el queso crema con el queso azul e introducimos la mezcla en una manga de repostería con la que rellenamos las uvas. Una vez rellenas, metemos las uvas en el congelador una hora como mínimo para que la mezcla de los quesos se endurezca y tras ese tiempo las pasamos al frigorífico. Sacar unos minutos antes de servir. Se pueden decorar con nueces.

Esta receta puede hacerse tanto con uvas blancas como con uvas tintas y la proporción de queso azul puede variarse en función de los gustos personales.

TOSTA DE UVAS Y CAMEMBERT

Ingredientes

• 20 uvas negras, 4 rebanadas de pan ,120g de queso camembert, 8 ramitas de tomillo fresco, 3 cucharadas de aceite de oliva, pimienta.

Precalentamos el horno a 190 grados. Lavamos las uvas y las ponemos en una bandeja, añadimos cuatro ramitas de tomillo y un poco de aceite de oliva. Horneamos las uvas durante diez minutos o hasta que parezca que se van a abrir. Las reservamos templadas.

Cortamos las rebanadas de pan y las untamos con un pincel de cocina con unas gotitas de aceite de oliva las colocamos en otra bandeja de horno y distribuimos el queso camembert por encima en lonchas, las horneamos durante otros ocho minutos o hasta que veamos que el queso se comienza a derretir. Las retiramos del horno y les añadimos las uvas por encima del queso, una ramita de tomillo y una pizca de pimienta. Servimos rápidamente antes de que se enfríen.

Como sugerencia propongo acompañar estos entrantes con Tamaral Verdejo 2011, un blanco joven de color pajizo y gran intensidad aromática, con notas florales y frutales. En boca  destaca por su frescura, acidez y sobretodo por su equilibrio y estructura.

Bienvenidos

Mi interés por la gastronomía empezó un día cualquiera en la cocina de mi casa porque tengo la suerte de tener una gran cocinera por madre que, tanto a mi hermana como a mí, nos ha sabido transmitir la pasión por la cocina y la gratitud de cocinar para la gente que te importa. El interés por el vino, como es lógico, comenzó años después, pero con ascendencia rodense y viviendo a escasos kilómetros de Haro era de esperar que el vino formara parte de mi vida. A día de hoy he conseguido aunar estas dos aficiones ya que soy estudiante de enología y sin ser una gran cocinera me defiendo sin dificultad. Con el blog pretendo fusionar estos dos mundos.

Por cierto, mi nombre es Alejandra, aunque todo el mundo me conoce como Alex.